Aunque existen otras formas del DNA, el DNA B es la más estable y la que predomina en los seres vivos
El RNA, sin embargo, adopta una estructura más parecida a la forma A, para permitir el acomodo del -OH2'
En esta tabla se resumen las diferencias en la geometría de las tres formas del DNA.
La forma B es sin duda la más frecuente. Toda la evidencia indica que la mayoría del DNA está en esta conformación.
La forma A se presenta en cadenas de RNA, de las que hablaremos más adelante, en doble hélices híbridas de DNA con RNA, como las que se forman en transcripción.
La forma Z, se ha postulado como una conformación relacionada con fenómenos transitorios, que ocurren en el manejo de la información genética. La evidencia es aún insuficiente.